Marina Fakhouri y Bruno Pommier, delegados del CICR, visitaron Lugansk, en el este de Ucrania, entre el 21 y el 26 de agosto, y comparten aquí sus experiencias y observaciones.
La situación en Lugansk sigue siendo precaria, ya que persisten los bombardeos intermitentes, que causan riesgos para los civiles y dañan la infraestructura básica. Sólo funcionan cuatro de los nueve hospitales de la ciudad. El abastecimiento de alimentos, medicamentos y combustibles es errático. Las redes eléctricas y telefónicas están cortadas.
No hay indicación alguna de que la situación haya mejorado desde entonces. La preocupación principal sigue siendo la seguridad. "El hecho de que los bombardeos eran esporádicos y se producían varias veces al día generaba una sensación de temor permanente entre la población", señala Bruno Pommier.
Debido a la índole esporádica de los bombardeos, muchos hospitales han resultado dañados. Para Marina Fakhouri, la presión sobre la infraestructura sanitaria y el personal médico resultaba evidente: "Es importante mencionar que ni siquiera los centros médicos están a salvo, que hubo proyectiles que impactaron en los hospitales y que, obviamente, son pocos los médicos están prestando servicios porque muchos se han ido. El transporte desde y hacia los hospitales es muy difícil. Los que se han quedado son personas sumamente valientes y están haciendo un trabajo increíble".
Además, la falta de electricidad está afectando enormemente la vida de la población, ya que ahora falta el agua corriente y los sistemas de saneamiento se han deteriorado. Algunas personas que trabajaban en los sistemas de saneamiento y que dialogaron con Bruno Pommier señalaron: "Se avecina una situación muy alarmante, que podría causar un problema epidemiológico en la ciudad de Lugansk".
Las prioridades del CICR son asegurar que los hospitales cuenten con un suministro fiable de agua y con abundantes insumos médicos, hallar la forma de que los familiares puedan intercambiar noticias, y fomentar el mayor respeto de las normas del DIH que rigen la conducción de las hostilidades.
"La situación de la población civil en Lugansk es desastrosa. Todos los días hay heridos, todos los días hay muertos, y esto no puede durar indefinidamente", dice Bruno Pommier.
Lista de imágenes
Lugar: Ginebra, Suiza
Fecha de filmación: 1º de septiembre de 2014
Duración: 2’44
Formato: H264 Mov HD & SD
Produción: Neha Thakkar/Didier Revol
Cámara: Fabien Cachin
Sonido: Inglés
Ref. del CICR: AV217N
Derechos: CICR, acceso irrestricto
00:00 SONIDO (en inglés): Marina Fakhouri, delegada del CICR
"Nuestra preocupación principal es la seguridad de la población, afectada por los bombardeos esporádicos, dirigidos contra la población que quedó en la ciudad o contra otros objetivos. Nunca se sabe cuándo será el próximo, por lo cual resulta muy difícil moverse".
00:17 SONIDO (en inglés): Bruno Pommier, delegado del CICR
"La ciudad ha quedado aislada del resto del país. No hay agua ni electricidad. La red telefónica está cortada. Por ello, las personas que se quedaron en Lugansk permanecen en sus hogares, también debido a los bombardeos esporádicos sobre la ciudad y los suburbios. La gente realmente no se atreve a salir a la calle".
00:45 SONIDO (en inglés): Bruno Pommier, delegado del CICR
"El hecho de que los bombardeos eran esporádicos y se producían varias veces al día generaba una sensación de temor permanente entre la población. Por eso, la mayoría de las personas se quedaban en casa todo el día y si podían, se refugiaban en el sótano. Eso es lo que hicimos también nosotros".
01:05 SONIDO (en inglés): Marina Fakhouri, delegada del CICR
"Es importante señalar que ni siquiera los centros médicos están a salvo, que hubo proyectiles que impactaron en los hospitales y que, obviamente, son pocos los médicos que están prestando servicios porque muchos se han ido. El transporte desde y hacia los hospitales es muy difícil. Los que se han quedado son personas muy valientes y están haciendo un trabajo increíble".
01:28 SONIDO (en inglés): Bruno Pommier, delegado del CICR
"La falta de electricidad tiene consecuencias humanitarias importantes y afecta enormemente la vida de la población. Una de las consecuencias es que no hay agua corriente. Otra se vincula con el funcionamiento del sistema de saneamiento. Algunas personas que trabajaban en los sistemas de saneamiento señalaron que se avecinaba una situación muy alarmante, que podría causar un problema epidemiológico en la ciudad de Lugansk,
02:00 SONIDO (en inglés): Marina Fakhouri, delegada del CICR
"El CICR ha instado a todas las partes a que respeten las normas principales de la conducción de hostilidades, en particular la misión médica, puesto que comprobamos que hubo hospitales alcanzados por el bombardeo. Las ambulancias también resultaron dañadas o no podían cumplir sus tareas adecuadamente. Esto preocupa mucho al CICR, ya que hay víctimas civiles y personas que necesitan atención traumatológica urgente".
02:29 SONIDO (en inglés): Bruno Pommier, delegado del CICR
"La situación de la población civil en Lugansk es desastrosa. Todos los días hay heridos, todos los días hay muertos, y esto no puede durar indefinidamente".
02:44 FIN